Parque Nacional volcán Arenal

volcanes

Como ya anticipé en el artículo anterior -PARQUE NACIONAL DE TORTUGUERO. COSTA RICA. AMÉRICA (SEGUNDA PARTE)- estábamos en volcán Arenal, sito en el distrito y/o pueblo de La Fortuna del cantón número 10 (San Carlos) provincia de Alajuela.

 

Tras registrarnos en el hotel Montaña de Fuego Resort & Spa (a unos ocho kilómetros del centro de La Fortuna) buscamos la habitación asignada: un elegante y lujoso bungalow, clase Garden Deluxe (Jardín de Lujo). Dentro tuvimos la sensación de estar en un amplio, cómodo y equipado chalé. Además de la habitación de matrimonio tiene un saloncito, una especie de cocina y baño privado con jacuzzi.

Debido al cansancio acumulado el cuerpo solo nos pedía cenar y descansar. Y como al otro lado de la carretera hay un supermercado, que es propiedad del hotel,  compramos algo de cena. De nuevo en el bungalow Iván y yo nos dimos un baño calentito y espumoso en la bañera de hidromasaje; cenamos mientras veíamos Los Simpson -en versión latina- y nos echamos a dormir.

Como teníamos un día libre había contratado una excursión de trece horas. Era la más completa que encontré e incluía:

-Entrada a la Reserva Natural Mistico Arenal Hanging Bridges Park. Caminata por los puentes colgantes del Parque Nacional Volcán Arenal.

-Senderismo, ruta 1968 del volcán Arenal.

-Almuerzo (buffet).

-Entrada a la Catarata Río Fortuna del Parque Nacional Volcán Arenal. El personal de la excursión proporciona toallas de baño.

-Entrada a las aguas termales Paradise Hot Springs Resort. Incluye servicio de toalla.

-Cena (buffet) en el restaurante Azalia del hotel.

Coste: 180 dólares, por persona.

Incluye los tickets de acceso y botellas de agua.

Hora de recogida en la recepción del hotel: 08:00 horas.

Importante: lleva repelente de mosquitos, protector solar, calzado cerrado y ropa de baño.

Nota: algunos puntos de la excursión no son aptos para personas con movilidad reducida o que sufran vértigo.

A las siete de la mañana, caminando hacia el restaurante del hotel -se llama Acuarelas y sirven desayunos y comidas al más puro estilo costarricense- contemplamos el volcán Arenal en todo su esplendor.

Con los estómagos llenos nos dirigimos a la recepción, donde minutos antes de la hora concertada esperaba Roger, quien sería nuestro chófer y guía.

Tras presentarnos y subirnos en el todoterreno, nos encaminamos a Mistico Arenal Hanging Bridges Park.

Desde nuestro hotel hasta la entrada de la Reserva Natural hay 11, 7 kilómetros (carretera 142). Con lo cual el tiempo que se invierte en llegar no excede los veinte minutos. Aunque nos demoramos un poco porque al pasar por un lago le pregunté a Roger si podía parar para fotografiarlo. A decir verdad fue muy atento y se portó muy pero que muy bien con nosotros; y nos contó un montón de cosas, unas interesantes y otras simpáticas.

MENCIÓN ESPECIAL AL LAGO ARENAL

El lago realmente es un embalse artificial llamado Arenal que se formó tras la construcción de una presa (año 1979) que tenía una laguna con el mismo nombre. Sobre él recae un importante proyecto para generar energía hidroeléctrica, y produce casi toda la energía del país.

El lago Arenal es el más grande de Costa Rica y se ubica en las proximidades del volcán Arenal, el bosque nuboso de Monteverde y el Parque Nacional Volcán Tenorio.

Las dimensiones del lago Arenal son: 30 kilómetros de largo y cinco de largo.

Su superficie es de 85 kilómetros cuadrados y tiene una profundidad que va de los treinta a los 60 metros.

RESERVA NATURAL MISTICO ARENAL HANGING BRIDGES PARK – PARQUE NACIONAL VOLCÁN ARENAL

Tras estacionar el todoterreno en el parking, Roger nos llevó a un mirador desde donde se ve el majestuoso volcán Arenal. Y mientras que fue a comprar las entradas Iván y yo le esperamos haciendo fotos.

La vista del volcán no era tan nítida como por la mañana. Por la parte alta -entre la cima y la falda- le cubrían nubes blancas. En cambio no lograba apreciar las nubecillas que había visto al levantarme.

-Roger, está mañana me pareció ver que por la boca del cráter había como hilillos de nubes-. Le dije cuando vino con los tickets.

-No eran nubes. Lo que viste fue el humillo que aún desprende-. Dijo él.

DATOS DE MISTICO

-259 hectáreas protegidas de bosque húmedo tropical. Cuenta con más de 350 especies aves y más de 700 de plantas.

-Recorrido entre dos horas y media a tres por Parque Mistico Puentes Colgantes Arenal (3.108 metros). Se realizan paradas para observar a los animales y la flora.

También puede haber parones en las entradas de los puentes colgantes ya que por cuestiones de seguridad solo se permite que en ellos haya un máximo de quince personas.

Nota: antes de ingresar a la Reserva Natural lee detenidamente las normas y respeta las prohibiciones. Te adelanto que no se puede alimentar a los animales ni tocar nada; y que está prohibido fumar, dar gritos o voces y balancearse y/o columpiarse sobre los puentes colgantes.

ENTRADA JARDÍN DEL RUFOUS

Este bonito jardín está custodiado por un par de esculturas que representan a los indígenas. A la izquierda se ven dos esferas negras. Roger nos explicó que eran réplicas de las originales, que son de piedra y tienen una forma perfecta.

En el distrito de Sierpe -cantón de Osa, provincia de Puntarenas- (delta del Diquís al sur de Costa Rica) hay más de quinientas petroesferas precolombinas. Se fabricaron entre los años 500 a. C .- 1500 d. C. por las culturas precolombinas.

Las misteriosas petroesferas costarricenses son únicas en el mundo.

El 16 de julio de 2014 fueron declaradas símbolo nacional del país por la Asamblea Legislativa de Costa Rica. Ese mismo año la UNESCO declaró Patrimonio Cultural Mundial los ASENTAMIENTOS CACICALES PRECOLOMBINOS CON ESFERAS DE PIEDRA DEL DEL DIQUÍS.

El Jardín del Rufous tiene un letrero con la recomendación: disfruta del sonido de la naturaleza, por favor mantenga su voz baja durante el recorrido.

Al pie, la frase en inglés A spiritual connection, invita a conectarse espiritualmente con Mistico. Y en la parte superior el dibujo de una dama que brota del volcán Arenal -símbolo de la Madre Naturaleza- provee al entorno con mariposas y agua.

Disfruta del florido jardín mientras caminas por la senda vallada de madera, y aspiras los aromas que emanan las flores y plantas, entre las que abundan las stachytarphetas.

Sobre la stachytarpheta Roger nos contó que en Costa Rica se la conoce como “rabo de zorro” y que de ella extraen el néctar los colobríes y las mariposas.

Dejando atrás el exótico Jardín del Rufous cruzamos los tres primeros puentes:

-Puente El Pavón con 3,5 metros de alto y ocho de largo.

-Puente El Saíno con 8 metros de alto y veinte de largo.

-Puente El Jacamar con 10 metros de alto y dieciocho de largo.

Entre puente y puente veríamos basiliscos, murciélagos refugiados en los huecos de los árboles y pequeñas serpientes enroscadas -encima de hojas de helecho- de las que Roger dijo que podrían llegar a medir metro y medio.

El cuarto puente, Puente Vista Arenal con 45 metros de alto y dieciocho de largo, como bien indica su nombre, tiene vistas al volcán Arenal.

A este le siguen:

-Puente Escalera de Mono con 1 metro de alto y cinco de largo.

-Puente El Pilón con 21 metros de alto y cincuenta y tres de largo.

-Puente La Catarata con 45 metros de alto y noventa y dos de largo.

-Puente Tucán Pico Iris o Puente Tucán pico Arcoiris con 3 metros de alto y diez de largo.

Al final del Puente Tucán pico Arcoiris leímos un letrero que da dos opciones: continuar a la izquierda por el Sendero principal o tomar el Sendero a la catarata o Catarata Morpho Azul. Mi hijo y yo, por supuesto, nos desviamos a la derecha y descendimos por el Puente Mistico, que tiene la misma altura y largura que el Puente Tucán pico Arcoiris.

Abajo, y junto a la catarata Morpho Azul, comprobamos que es una pequeña caída de agua de 18 metros. Como todo lo que brota, florece y habita en el frondoso bosque Mistico la cascada merece ser visitada.

El origen de su nombre lo encontramos en la mariposa Morpho Azul.

MENCIÓN ESPECIAL A LA MARIPOSA MORPHO AZUL

La mariposa Morpho Azul es de un color azul brillante que revolotea por esta área y está en peligro de extinción. Este lepidóptero es solitario y uno de los más grandes del mundo. Su envergadura alar oscila entre los 12 centímetros y medio y los veinte. Sus alas destacan por los destellos iridiscentes metalizados. Estos reflejos- que solo se dan en el dorso- la convierten en una mariposa única en el mundo.

La belleza que le aporta el color azul se asocia a la trasmisión de emociones como la alegría y la esperanza. Asimismo se cree que la mariposa Morpho Azul trae suerte y concede deseos a quien tiene la inmensa “suerte” de ver una.

De nuevas en el sendero principal cruzamos los puentes décimo y undécimo llamados Puente Hormiguero (28 metros de alto y ochenta y siete de largo) y Puente El Palmito (14 metros de alto y quince de largo) hasta la boca del Túnel Mano de Piedra o Túnel Serpiente Mano de Piedra. Y tras él pasaríamos los restantes, que son:

-Puente Terciopelo o Puente La Terciopelo con 24 metros de alto y cuarenta y ocho de largo.

-Puente El Olingo con 8 metros de alto y diecisiete de largo.

-Puente La Pava con 8 metros de alto y once de largo.

-Puente La Tarántula con 1 metro y medio de alto y ocho de largo.

PUENTE EL TOMOLUCO

El Tomoluco es el último de un total de dieciséis puentes. Es el más largo de los puentes colgantes (24 metros de altura – 97 metros de largura).

El final de este puente conduce a la salida.

Concluido el recorrido por Mistico Arenal Hanging Bridges Park solo nos faltaba hacernos fotos en el mirador del parking (lateral izquierdo de la recepción).

TREKKING RUTA 1968 – PARQUE NACIONAL VOLCÁN ARENAL

Media hora más tarde esperábamos en el puesto Arenal 1968 MIRADOR Y SENDEROS pues en él se compran los tickets para acceder a las rutas Sendero del Bosque o Sendero “Bosque 1968” (señalizado en amarillo) y Sendero Colada 1968 (señalizado en rojo).

La ruta sugerida por Roger fue la roja y nos llevaría un par de horas (desde las doce hasta las dos de la tarde).

Sendero Colada 1968 -cuyo recorrido es de unos dos kilómetros- tiene un especial simbolismo: 1968 es el año que el volcán Arenal iniciaría el actual periodo de actividad volcánica. La fecha exacta en la que entró en erupción fue el 29 de julio de 1968, a las 07:30 horas.

El volcán Arenal se sitúa a unos ocho kilómetros del pueblo de La Fortuna. Es de tipo estratovolcán (forma cónica) y tiene una altura de 1670 metros.

Es uno de los más activos de Costa Rica; y el más conocido dentro y fuera del país.

Antes de meternos de lleno en la ruta cogimos unas varas que estaban al lado del panel de las rutas y subimos las escaleras que dan a un mirador. Como no podría ser de otro modo desde él se divisa el volcán Arenal; también una panorámica de la cordillera Tilarán y del lago Arenal.

Tras caminar varios minutos hallamos una “cosa rara”. Al preguntar a Roger por ese extraño objeto nos dijo que había formado parte de la utillería de una película norteamericana de ciencia ficción -rodada en La Fortuna- titulada After Earth (Después de la Tierra). Aquella “cosa rara” eran los restos abandonados de uno de los huevos en los que los protagonistas del film -los actores Jaden Smith y Will Smith- llegaron a Nova Prime desde la Tierra.

Desde este punto se ve una esplendorosa vista del volcán. Y las señalizaciones invitan a que continúes las sendas.

En la ruta Sendero Colada 1968 hay un letrero a la izquierda donde se lee ASCENSO ESCARPADO. Avanzando flaqueado por el estrecho arbolado verás otro, a la derecha, que indica CIMA COLADA DE LAVA. DISTANCIA: 350 METROS.

Según se va ascendiendo por el terreno pedregoso, las primeras coladas de lava invaden el suelo.

Ya en la Cima Colada de Lava las vistas de la cordillera, el lago y el volcán dejan sin palabras. Aquí hay una SALIDA DE EMERGENCIA.

Descendiendo, comprobabas que la vegetación ha vuelto a brotar entre la lava, devolviendo la esperanza de vida a la base del volcán.

Continuando, cruzamos un pequeño puente y anduvimos entre colosales plantaciones hasta llegar al letrero SALIDA DE SENDEROS. A unos cinco minutos andando se ve, a la derecha, los restos de otro huevo de After Earth.

Finalizado el trekking subimos al todoterreno y nos dirigimos a un restaurante en las afueras del pueblo, puesto que eran casi las dos de la tarde y tocaba almorzar.

De la caminata por el Sendero Colada 1968 destaco que la disfrutamos al máximo porque el día estuvo despegado y apenas nos topamos con otras personas. Eso sí, hizo un calor infernal y sudamos la gota gorda.

Como desde Arenal 1968 MIRADOR Y SENDEROS hasta el restaurante invertimos unos treinta y cinco minutos, los tres intercambiamos impresiones.

A la gente de Costa Rica le gusta el baile, y parece que aprenden a bailar en la calle. También son fanáticos del fútbol.

Al pasar por la plaza de toros de La Fortuna le pregunté a Roger si a los costarricenses les gustan las corridas de toros. Me dijo que sí. Y me aclaró que allí solo se les torea.

En un país que protege al medio ambiente y a los animales es razonable que no se lastime a los astados, pensé para mis adentros.

Al mencionar a los toros recordé a los tucanes.

El guía de Tortuguero nos había dicho que los tucanes siempre están en la parte alta de los árboles y que no suelen bajar al suelo.

-Sí, sí que bajan sí-. Dijo Roger. Y añadió-. Son unos muertos de hambre y bajan a la tierra para comer. Y así pasa, que ahí es cuando ¡Zas! Les agarran las boas y se los comen enteritos.

El comentario me hizo mucha gracia y recordando una anécdota vivida en Faunia (Parque Temático de la Naturaleza en Madrid) conté así:

-Cuando mi hijo Iván era muy pequeñín le llevé a Faunia para que viera los animales. Y como fuimos con intención de pasar el día llevamos unos bocadillos de pan de molde de mortadela para merendar. Serían las cinco y pico de la tarde cuando entramos a la zona donde están las aves. Dentro hay una sala con tucanes y micos, y como Iván tenía en la mano el bocadillo de mortadela, uno de los micos se lanzó al bocadillo y, agarrándolo, comenzó a tirar de él. Mi hijo lo seguía sujetando pero como el mico no desistía en el intento dije: dale el bocadillo hijo, que es capaz de comerte a ti si no lo sueltas. Así lo hizo Iván, y nos quedamos allí viendo a las aves y dando frutos secos a los monos. Pues no habrían pasado ni diez minutos cuando me dio por mirar hacia arriba. Entonces vi que a uno de los tucanes le colgaba media rodaja de mortadela del pico. Lo mejor de todo es que la rodaja de mortadela era tan grande como el pico del tucán. Nos quedamos a cuadros. Qué risa pasamos.

ALMUERZO – RESTAURANTE ARENAL VIDA CAMPESINA

Entre risas llegamos al Restaurante Arenal Vida Campesina.

El restaurante Arenal Vida Campesina lo regenta la familia González Barrantes y es ecológico.

Al entrar Roger nos dijo que nos laváramos las manos en un lavabo que hay en el mismo salón comedor. Pronto nos sentamos en la mesa adjudicada. Y comimos ensalada, verduras, arroz, carne; nachos, yuca… Que decir que todo estuvo delicioso.

Como podíamos repetir tantas veces como quisiéramos me eché varias veces puñaditos de yuca porque me gusta mucho. Y Roger, al ver que me gustaba tanto, nos contó una anécdota simpatiquísima.

-Una vez me tocó llevar a un holandés y cuando pasamos por un campo me preguntó: oiga, ¿Se pueden llevar esas hojas que están ahí? Sí claro, le dije yo. Entonces me dijo que si podía parar, y paré.  Y el hombre seguía preguntando: pero oiga, ¿En serio se pueden llevar esas hojas de ahí? Toda la plantación si gusta, dije yo. Ahí va ese hombre arrancando puñados de hojas y las va metiendo en una bolsa mientras me pregunta: ¿pero aquí no las fuman? Cómo vamos a fumar eso, dije yo, si de esa planta se saca la yuca. Si ves a ese hombre botar las hojas al suelo enfurecido ¿Pues no creía que las hojas de yuca eran marihuana?

La comida culminó con el postre y con un café artesanal. Porque todo lo que se guisa y sirve en Arenal Vida Campesina está hecho con productos naturales.

Después del saludable almuerzo Roger nos enseñó la finca, que está en la parte trasera del restaurante.

En la finca la familia González Barrantes cultiva árboles frutales y plantas medicinales. También tienen animales de granja, invernaderos y una estatuilla de la virgen de los Ángeles (patrona de Costa Rica).

Como curiosidad deciros que Roger, tras coger granos de un cafeto, nos los dio a probar. La sensación al meterlos en la boca no fue agradable.

La visita por la finca estuvo muy bien; pero el agobiante calor, y la hora, nos recordaba que el tour debía continuar.

CATARATA RÍO FORTUNA – PARQUE NACIONAL VOLCÁN ARENAL

No habrían pasado ni diez minutos cuando estábamos estacionados en el parking de la catarata Río Fortuna. Nos apeamos del todoterreno, Roger fue a por las entradas e Iván y yo nos metimos en los vestuarios con las toallas para ponernos los trajes de baño.

A las cuatro menos cuarto, o menos diez, Roger nos dio los tickets.

Catarata Río Fortuna cierra a las 17:00 horas así que teníamos una hora y unos minutillos para disfrutar de esta reserva biológica perteneciente al Parque Nacional Volcán Arenal.

La reserva tiene 210 hectáreas de bosque tropical húmedo premontano de transición y se eleva 520 metros sobre el nivel del mar. En ella se encuadra el Cerro Chato, el Cerro de los Perdidos y las Placas de Mayo.

La Asociación de Desarrollo Integral de La Fortuna -ADIFORT- gestiona el espacio natural. Creada el 31 de agosto de 1969, la organización, sin ánimo de lucro, tiene como objetivo primordial velar por el bienestar y crecimiento de la comunidad del pueblo. Sus proyectos se llevan a cabo con el dinero que dejan los turistas al visitar la catarata.

Preparados para afrontar la nueva aventura -una vez que nos pusieron una pulsera identificativa de control- Iván y yo accedimos y seguimos el letrero Sendero de Orquídeas y Catarata, desviándonos hacia el de la Catarata.

Al frente, la vista de la catarata Río Fortuna nos sorprendió.

Continuamos.

A pocos metros nos topamos con el letrero Stop. Antes de entrar al sendero…

(Trascribo las seis advertencias):

-Es una caminata moderadamente empinada de 600 metros por medio de 500 escalones aproximadamente.

-No se recomienda el descenso a personas con padecimiento de hipertensión, asma, problemas cardíacos, mujeres embarazadas, obesidad.

-Recuerde que no hay servicios sanitarios ni vestidores a partir de este punto.

-El cuidado de sus pertenencias queda completamente bajo su responsabilidad.

-No salga del sendero.

-No extraiga plantas.

Leídas las advertencias comenzamos la bajada (que luego habríamos de subir).

Durante el recorrido podrás parar en unos cuidados descansillos y leer sentencias didácticas y hermosas, salidas de la boca del gurú perezoso:

“El secreto no es correr detrás de las mariposas… Es cuidar el jardín para que ellas vengan a ti”. “No es quien más alto llega, sino aquel que influenciado por la belleza que le envuelve, más intensamente siente”. “No escalas la montaña para que todo el mundo pueda verte, sino para que tú puedas ver al mundo”.

Y entre lectura, escalón a escalón, envueltos por la embriagadora panorámica, llegaríamos al letrero con las precauciones:

  1. No camine cerca o detrás de la catarata.
  2. ¡Cuidado! Piedras resbaladizas.
  3. ¿No sabe nadar? Por favor quédese en la orilla.
  4. No nade cerca de la catarata.
  5. Si el agua se torna marrón, salga del río. Puede haber una crecida del mismo proceso.

Desde aquí la ruidosa caída de agua de 70 metros de la catarata Río Fortuna parecía gritar: ¡Dejad de mirarme y meteros en el agua! Y sin pérdida de tiempo, dejamos las toallas, las chanclas y mi camiseta recién estrenada (la había comprado ese mismo día) y nos metimos en las cristalinas y frías aguas.

El lugar estaba muy animado, con personas amigables y sociables venidas de distintas partes del mundo. Y aun distintos entre sí -algunos sin hablar el mismo idioma- nos comprendíamos ya que a todos nos unía el mismo propósito: divertirnos y descubrir un nuevo rincón de nuestro bello planeta.

Después del baño fuimos a ver qué había a nuestra derecha y encontramos otra zona apartada, pero no menos solitaria. En este lado del río había familias con niños que se bañaban y jugaban.

Miramos el reloj, faltaban veinte minutos para la hora de cierre.

Bajar nos había llevado menos de diez minutos, sin embargo subir podría llevarnos algo más.

Como no, antes de empezar el ascenso hicimos una última parada en el mirador   que hay abajo para contemplar la catarata.

El baño en la catarata Río Fortuna había sido frío. En cambio los que nos esperaban en las termas serían todo lo contrario.

AGUAS TERMALES – PARADISE HOT SPRINGS RESORT

De todas las actividades que pueden hacerse en la zona de Volcán Arenal y La Fortuna quizá la de meterse en las aguas termales sea imprescindible.

Desde la catarata Río Fortuna hasta la entrada a Paradise Hot Springs (Resort) hay 7 kilómetros de distancia. Por tanto en un abrir y cerrar de ojos nos encontramos en la recepción termales. Y tras ponernos la pulsera identificativa de control y  prestarnos un par de toallas seguimos las indicaciones que nos llevaron a las taquillas, donde dejamos la ropa.

Antes de entrar a las termas nos habíamos despedido de Roger. Su jornada laboral finalizaba y la vuelta al hotel Montaña de Fuego Resort & Spa la haríamos con otro chófer.

Roger, además de chófer y guía, había sido un excelente anfitrión. En agradecimiento le di -de propina- un billete equivalente a 10 euros. Y como no suelo dar propinas, mi hijo le dijo bromeando:

-Has tenido mucha suerte porque mi madre es algo tacaña y nunca da propinas-. Y él, siguiendo la broma, preguntó-. ¿Entonces qué hago con este billete, lo enmarco?

-Sí, y lo guardas como oro en paño-. Dije riendo. Pero al momento añadí .-No. Gastátelo y tómate unas cervecillas a nuestra salud: te lo has ganado a pulso.

Bordeado por jardines tropicales -y al pie del volcán Arenal- realizamos el circuito por las cinco piscinas y los tres jacuzzis (por el orden recomendado del plano).

Paradise Hot Springs no estaba masificado y las más de dos horas que estuvimos en sus aguas termales nos proporcionaron quietud; pero sobre todo calmaron y relajaron nuestros cuerpos pues las piscinas y jacuzzis, que van de los 27 a los 40 grados de temperatura, tienen chorros dirigidos al cuello, espalda, piernas y pies.

Iván y yo habíamos llegado al atardecer, por lo que las últimas luces del día -fusionadas con las del recinto- nos acompañaron baño tras baño,

Secos y vestidos, cenamos en el restaurante Azalia amenizados con música en vivo.

Tocaba descansar. Al día siguiente nos esperaban cinco horas en carretera hasta Tamarindo.

Estábamos felices: las experiencias vividas habían sido increíbles. E inolvidables.

Por Carolina Olivares Rodríguez.