La energía eléctrica podría bajar ahora un 70%, con solo la voluntad política.

La energía eléctrica podría bajar ahora un 70%, con solo la voluntad política. Fundación Madrina cuestiona la efectividad del Bono Social o cualquier otra medida de “ingeniería social” que se aplique para las familias más vulnerables y propone 5 medidas para bajar la factura de la luz

Las medidas sociales que se quieren implementar como el Bono social eléctrico, al igual que lo hizo el IMV no han llegado a las familias que más lo necesitaban y han tardado un año en implementarse, cuando las familias ya han quebrado en el camino.

Los alquileres de habitaciones, que es donde habita la población más vulnerable, podrían subir el precio un 30%, por lo que se hace inviable vivir en las ciudades.

Las familias vulnerables en España ya no tienen dinero ni para coger el transporte urbano ni para recoger alimentos. Las familias están técnicamente en “quiebra de deuda”.

El bono social de electricidad es un descuento en la factura eléctrica. De un 25% para consumidores vulnerables que cumplan los requisitos establecidos. De un 40% para consumidores vulnerables severos que cumplan los requisitos establecidos.

La situación real es que la mayoría de las personas más vulnerables que comparten vivienda en habitaciones lo pagan en “B” a su casero y verán que el próximo otoño se les repercutirá la factura de la luz con el correspondiente incremento exponencial de la misma, y que ha marcado en agosto un precio histórico de 140,23 € por Mwh.

Así, los propietarios de viviendas con habitaciones en alquiler, repercutirán en la misma medida el precio de los alquileres, de este modo, nos vamos a encontrar con subidas como mínimo del 30% en el precio de los alquileres de habitaciones, haciendo de nuevo inaccesible la vivienda para las familias más vulnerables, especialmente monoparentales o con hijos menores. Hay que tener en cuenta que una familia monoparental con uno o dos hijos menores puede tener un trabajo precario por el que cobra 500 €.

Por término medio el coste de la luz se ha disparado a más de 100 € por hogar en los últimos meses. En algunas ocasiones ha llegado a suponer 300 € al mes, por ejemplo durante el temporal “Filomena” o este verano con facturas de hasta 150 € en hogares vulnerables. Ninguno puede pagar y las familias vulnerables ya no tienen dinero ni para coger el transporte urbano ni para recoger alimentos.

Familia monoparental Ingresos €
Ingresos 500
Coste alquiler 300
Coste energía hace un año 30
Coste energía actual 110
Capacidad ahorro para otros gastos 90

 

Actualmente, la factura eléctrica en España es una máquina de recaudar impuestos sobre impuestos, además de tener uno de los IVA más caros de Europa. La transición ecológica que se nos plantea es cara y se paga en la tarifa. Sin embargo, en Europa, los sistemas tarifarios tienen exención de impuestos para un determinado nivel de consumo.

En España se castiga el consumo de hogares que no pueden poner la lavadora por la noche, pues viven en comunidad y la lavadora habitualmente se comparte.

Las empresas que generan el 80% del empleo en España, las Pymes, suelen tener tres costes proporcionados, la energía, el coste laboral y los impuestos. Cualquier alteración de este equilibrio, hace que las empresas ya no sean viables, afectando a la creación de empleo y aumentando la devastación que ha habido en la destrucción de empresas.

Los alquileres de habitaciones, que es la población más vulnerable, podrían subir el precio un 30%, por lo que se hace inviable vivir en las ciudades.

Fundación Madrina propone…

La bajada del precio no vendrá mediante “ingeniería económica” o de nuevo “ingeniería social” que sabemos que llega siempre tarde, o no llega a los que realmente lo necesitan. En este sentido, la creación del IMV se ha demostrado que no ha funcionado, no ha llegado ni en tiempo ni en forma a los hogares más vulnerables. Muchas familias siguen sin poder vivir con esta ayuda a la espera del trabajo que no llega.

Ha habido 1,15 millones de solicitudes válidas desde que se puso en marcha la prestación. De ellas, un 18%, 800.000, un 70% del total se han tramitado, y solo un 18%, 210.000 prestaciones han sido aprobadas, con un 52%, 600.000, denegadas. Un 5.4%, 62.000, están en proceso de subsanación, es decir, pendientes de información adicional para completar el expediente.

Miles de familias ya están “sobre endeudadas” y “quebradas”,

Para paliar este hecho, Fundación Madrina propone al Gobierno que adopte con carácter de urgencia, varias medidas:

  1. Que haya una tarifa plana y social, para las familias vulnerables.
  2. Que se proteja a las familias vulnerables y monoparentales con menores a cargo, con un precio de la energía sin impuestos: Cancelación o moratoria de impuestos estatales en la energía.
  3. Para reducir la tarifa hay que bajar impuestos y sacar costes regulados del recibo eléctrico. Hay que recordar que un 70% de los costes de la tarifa se supone en costes fijos ajenos al consumo de la energía eléctrica usada por los hogares.
  4. Que la génesis de la energía tenga un mix que incluya energías más baratas, como la energía nuclear que España compra a Francia.
  5. Que se aumente la producción de energía nativa, como la energía verde y el carbón para calentar estufas en domicilios particulares.

Esta subida, afecta al 100% de los hogares y 1 de cada 2 hogares vulnerables no puede pagar la factura