Crucero con la brújula hacia la antígua Persia: Creta

Palacio de Knossos

El 7 de diciembre de 2018 el barco Costa Mediterranea tenía prevista la llegada a la isla griega de Creta a las 08:00 horas, de la que zarparíamos a las cinco de la tarde. Nota: como ya comenté en el primer artículo viajero de la serie dedicada al CRUCERO DE POSICIONAMIENTO: CON LA BRÚJULA HACIA LA ANTIGUA PERSIA, la llegada al puerto de Heraclión, en Creta, se demoró dos horas y media por causas ajenas a la naviera (temporal marítimo). Para compensarnos el barco zarpó dos horas y media más tarde de la hora oficial.

Portico en el Ala NorteLa isla cretense es un soñado destino para el crucerista.

Si sabes organizarte bien en la escala matarás dos pájaros de un tiro: de una parte recorrerás la bella ciudad de Heraclión o Heraklion, de la otra podrás visitar las ruinas del Palacio de Knossos o Cnosos.

Carlos y yo lo teníamos claro: primero visitaríamos Cnosos, después la ciudad de Heraclion.

El Palacio de Knossos es el monumento minoico más importante de la isla. Y, asimismo, es el símbolo de Creta.

Cnosos se encuentra a unos 6 kilómetros al sur de Heraclión.

La mejor manera de llegar al lugar es en autobús. El trayecto dura un cuarto de hora.

EXCURSIÓN AL PALACIO DE KNOSSOS

Bajamos del barco. Y enseguida vimos una parada de BUS STATION TO HERAKLION CENTER & KNOSSOS.

Pronto nos informamos del horario y del precio de la entrada al palacio:

Horario, de ocho de la mañana a tres de la tarde.

Precio: 8 euros.

Cuando llegamos a la entrada del palacio nos llamó la atención la cantidad de personas que había; todas agolpadas, intentando comprar entradas.

No recuerdo cuánto tiempo estuvimos “haciendo cola”. Pero una vez que tuvimos las entradas en nuestro poder, el tumulto quedó atrás y la visita al Palacio de Knossos no nos decepcionó.

EL PALACIO DE KNOSSOS

El Palacio de Knossos es el mayor yacimiento arqueológico de la isla de Creta. Tenía una superficie de casi 22.000 metros cuadrados y contaba con más de mil quinientas estancias. Fue construido en la pequeña colina baja de Kephala -en el periodo Neolítico (6700 – 3200 a. C.)-, en la confluencia de dos arroyos.

Cnosos estaba rodeado por una extensa ciudad. La elección de la ubicación y posterior crecimiento del asentamiento conectaban con la proximidad al mar y a la tierra fértil de la región.

El primer palacio fue construido alrededor de 1900 a. C. (periodo del antiguo palacio). De las pocas partes que se conservan se deduce que el plan básico se formó en ese momento. Fue destruido, por un terremoto, alrededor de 1700 a. C. y el nuevo palacio se construyó en su lugar (periodo del nuevo palacio).

El Palacio de Knossos fue descubierto por el arqueólogo británico Arthur Evans, quien destapó y recuperó sus ruinas.

El palacio se componía de diferentes edificios (con entradas en los puntos principales) que se expandían al alrededor de un Patio Central, que se dividía en dos grandes conjuntos: el área occidental y el área oriental. El área occidental o Ala Oeste, incluía santuarios, salas o salones oficiales y excelentes zonas de almacenamiento. Y en el área oriental o Ala Este, se encontraban los “Royal Apartments” (Apartamentos Reales) y los talleres de trabajo. También había almacenes y otras zonas al norte y al sur.

El palacio muestra gran variedad de características arquitectónicas: pisos con techos planos de diversos niveles (cuatro o cinco), fachadas dentadas o salientes, adornos de cuernos de piedra con colores alternos. En su construcción se utilizó gran variedad de materiales: losas de yeso en las paredes, pórticos con columnas y pilares de madera, losas de esquisto verde para el suelo; yeso policromado y pinturas murales contribuyeron a la decoración de las estancias.

Con toda probabilidad -además de ser la residencia de los reyes-, el Palacio de Knossos fue un centro económico, político y de autoridad religiosa. Arthur Evans intentó interpretar la función de los espacios del palacio y les dio nombres que reflejaran su uso, según su criterio. Para ello se basó en los hallazgos, la tradición mitológica y las analogías con civilizaciones antiguas y su propia era.

Los nombres aún están vigentes.

El Palacio de Knossos continuó usándose después de 1450 a. C., incluso cuando el resto de los palacios de la isla fueron destruidos. Debido al descubrimiento de un archivo micénico, la mayoría de los expertos creen que en el palacio se instalaron nuevos habitantes del Continente Griego Micénico.

Acerca de cuándo dejó de funcionar el palacio, el dato es incierto.

En cualquier caso, después de 1380 a. C. gran parte de su antigua gloria se perdió.

ESTRUCTURA Y/O DIVISIÓN DEL PALACIO

ÁREA OCCIDENTAL O ALA OESTE

  1. Patio Oeste.
  2. Kouloures. En un gran patio o plaza occidental pavimentada hay tres pozos (“kouloures”). Posiblemente los pozos eran silos de grano.
  3. Porche Oeste.
  4. Calzada Procesional.
  5. Casa Sur.
  6. Propileo del Sur. En esta estancia se puede ver el Fresco de los Ritóforos.
  7. Almacenes del Oeste.
  8. Salón del Trono (Sala del Trono de knossos o Salón del Trono del Rey). La cámara estaba precedida por una antecámara.

En el Salón de Trono se puede ver un fresco con dos grifos simétricos.

  1. Santuario Tripartito (Santuario de las Tres Columnas).

El Santuario Tripartito pudo haber sido el principal del palacio.

En el interior del Santuario Tripartito se encontró una gran jarra y la Sala del Tesoro o Repositorio. En el repositorio, asimismo, se encontraron unas estatuas de loza vidriadas llamadas “diosas de las serpientes”.

ÁREA ORIENTAL O ALA ESTE

  1. Patio Central.
  2. Corredor del Príncipe de los Lirios. Esta cámara se encuentra junto al Corredor de las Procesiones.

En el Corredor del Príncipe de los Lirios se puede ver una copia del Fresco del Príncipe de los Lirios. La reconstrucción del fresco fue bastante polémica.

El Corredor del Príncipe de los Lirios y el Corredor de las Procesiones acababan el Gran Propileo o Propileo del Sur.

  1. Gran Escalera.

La Gran Escalera partía del Patio Central y daba acceso a los pisos superiores.

  1. Santuario de las Hachas Dobles.

-Casa del Gran Sacerdote.

-Casa Sureste y casas al este del palacio.

  1. Megaron de la reina o Gran Salón de la reina. En esta estancia se pueden ver el Fresco de los delfines y el Fresco de la bailarina (o Fresco de la danzarina).
  2. Sala de las Hachas Dobles. La cámara debe su nombre al símbolo de la doble hacha (“labrys”) que estaba grabado en las paredes.

La Sala de la Hachas Dobles se unía por un pasillo en forma de “L” al Megaron de la reina.

  1. Almacenes Pithos. El término “pithos” (o pitos) se refiere a las grandes tinajas de almacenamiento que se ven expuestas en el palacio.

-Talleres Artesanales y Aula Escolar.

-Entrada Este.

En la zona oriental o Ala Este, se pueden ver los restos del Fresco del Salto del Toro o Fresco de la Taurocatapsia. Y una pintura al frescor reconstruida llamada Damas de Azul.

  1. Corredor o Pasillo de las Bahías. Esta “vía real” conducía a los puertos de Amniso (o Amnisos) y Poros-Katsambás.
  2. Entrada Norte. En esta zona del Palacio de Knossos -en el pórtico o Propileo del Norte-, se puede ver una pintura de un toro furioso.

En esta zona se encontraron el Fresco del recolector de azafrán otro fresco que podría representar un banquete ceremonial en el que participaba “la Parisienne” o Dama Minoica.

  1. Casa de Aduanas o Sala Hipóstila.
  2. Cuenca Lustral Norte.
  3. Teatro.

La zona donde se encontraba el teatro conectaba al “pequeño palacio de knossos” por una vía pavimentada (camino sagrado).

CUERNOS DE CONSAGRACIÓN

En el Palacio de Knossos se reconstruyeron los Cuernos de consagración.

Los Cuernos de consagración es un símbolo que, supuestamente, representa a los cuernos de un toro sagrado.

Arthur Evans, tras encontrar muchos ejemplos en entornos micénicos y minoicos, llegó a la conclusión de que los Cuernos de consagración eran “un artículo más o menos convencional del instrumental ritual derivados de los cuernos reales del toro sacrificado”.

Otros arqueólogos y filósofos han identificado al símbolo con un ideograma egipcio muy similar, y han sugerido que representa a dos montañas (y no a los cuernos de un toro).

TABLERO DE JUEGO DE CNOSO

En el área noreste del Palacio de Knossos, Arthur Evans encontró el tablero de juego de Cnoso o “Zatrikion”.

Junto al tablero había cuatro piezas cónicas de marfil.

Tanto el tablero como las piezas se conservan en el Museo Arqueológico de Heraclión.

EL LABERINTO DE CRETA

La compleja estructura del Palacio de Knossos y su numerosa cantidad de corredores y estancias ha originado que algunas personas crean que en él se asienta el Laberinto de Creta.

LA LEYENDA DEL MINOTAURO

Cuenta la leyenda que Dédalo -un arquitecto ateniense desterrado a la isla de Creta- diseñó y construyó el laberinto, por orden del rey Minos, para encerrar en él al Minotauro.

El Minotaurio, de nombre Toro de Minos, es una criatura violenta de la mitología griega con cuerpo de hombre y cabeza de toro.

Toro de Minos era hijo de Pasífae -esposa del rey Minos- y de un toro blanco.

El toro blanco fue enviado por Poseidón (dios del mar) para que Pasífae se enamorara de él, como venganza por haber sido agraviado por el rey Minos.

Cada nueve años en la isla se realizaron sacrificios humanos. Por ello, catorce jóvenes -siete hombres y siete mujeres- eran conducidos al laberinto para ser devorados por la bestia, quien solo se alimentaba de carne humana.

Las personas, ya dentro del complejo y oscuro laberinto, vagaban desorientadas por sus pasillos hasta ser encontradas por el monstruo, quien las devoraba.

Los sacrificios humanos acabaron cuando Teseo -héroe y fundador de Atenas-, acabó con la vida del Minotauro.

Teseo, según la mitología griega, era hijo de Egeo y Etra; pero según otra tradición su padre fue Poseidón.

Egeo -padre de Teseo y rey de Atenas- mató a Androgeo, único hijo del rey Minos y heredero al trono. El hecho ocasionó que ambos reyes entraran en guerra. Y la ciudad de Atenas fue derrotada por Creta.

La isla sufrió el azote del hambre y de las enfermedades, y las imposiciones del rey Minos (sacrificios humanos).

El príncipe Teseo, tras lograr el permiso de su padre, se presentó para el sacrificio. Su objetivo era dar muerte al Minotaurio y acabar con la tiranía del rey Minos.

Cuando Teseo llegó a Creta una de las dos hijas del rey Minos, Ariadna, nada más verle, se enamoró de él. Y él de ella.

Ariadna, al enterarse que su amado entraría en el laberinto para matar al Minotauro, le ofreció su ayuda, dándole una espada y un ovillo de hilo de oro.

Porque una vez dentro del laberinto era imposible salir de él.

Nada más entrar al laberinto Teseo fue desenredando el ovillo. Y cuando el Minotauro le encontró, lo rodeó, a fin de agotarlo. Y una vez agotado, lo golpeó y lo mató, atravesándolo con la espada que le había dado la hija del rey Minos.

Muerto el Minotauro, Teseo siguió el hilo de oro y pudo encontrar la salida del laberinto.

DÉDALO E ÍCARO

Tras caer en desgracia, Dédalo fue encerrado en el laberinto de Creta junto a su hijo Ícaro.

Y estando encerrados en el mismo laberinto que el arquitecto había diseñado y construido, construyó para él y para Ícaro, unas alas de cera. Y con ellas, pudieron escapar del encierro y remontar sobre el mar Mediterráneo.

Pero el hijo, haciendo caso omiso a las advertencias del padre, voló hacia y el sol. Y se acercó tanto a él, que el calor derritió sus alas y cayó a las aguas del mar.

Por Carolina Olivares Rodríguez.