Excursión a Île aux Cerfs (Isla de los Ciervos)

Impresionante, maravillosa, preciosa… Por más calificativos que ponga en el artículo  jamás podría definirla ya que precisamente por su hermosura Ile aux Cerfs -de ahora en adelante Isla de los Ciervos- es definida como el lugar más famoso de Mauricio.

Si has decidido ir hasta este recóndito paraíso has tomado la decisión más inteligente porque es visita obligada por excelencia. Además, ya que has tenido el privilegio de llegar hasta Mauricio… ¿Cómo abandonar el país sin poner las plantas de tus pies sobre las arenas de las playas de esta isla? ¿Cómo no darte un baño en sus azules, cálidas y transparentes aguas?

             Breve descripción.

La pequeña isla está ubicada en la costa este del país. Y debe su nombre, a que antaño, estaba repleta de ciervos. Está compuesta por varias playas y una laguna central.

Por sí misma es espectacular. Tanto en la laguna como en otras partes de las playas, al adentrarte en el agua, volverás a resurgir y harás pie de nuevo en bancos de arena. Esto te dejará perplejo pues ha de ser lo más parecido a “caminar sobre las aguas.”

          Contratación de la excursión.

La escapada a la Isla de los Ciervos se puede contratar directamente con la naviera o hacerla por libre. Nosotros, en Mauricio, optamos por hacer todas las excursiones “a nuestro aire.”

Mauricio es un país seguro y tranquilo, por tanto voy a darte las pautas a seguir para que puedas realizarla por tu cuenta.

Temprano (08:30 horas) tras desayunar, baja a puerto y dirígete a la zona donde están aparcados los taxis… Ah, no olvides llevar ropa de baño, toallas, crema solar; equipo snorkel… En fin, lo imprescindible para disfrutar de un día playero.

Ahora sí que sí procedo a explicar lo que hicimos nosotros: luego de acordar con el chófer el traslado, desde el puerto hasta la otra punta de la isla (en Beau Champ) la recorrimos durante una hora, atravesándola de oeste a este por el interior. Por cierto, las carreteras de todo el país están en muy buen estado.

De antemano y, antes de salir, habrás de cerrar el precio con el taxista, que incluirá puntos referentes al trayecto, tanto de ida como de vuelta, y duración.

Precio: 30 euros por persona con posibilidad de descuento adicional dependiendo del número de personas que integren el grupo.

Ejemplo práctico:

-Grupo de cuatro personas: 120 euros. (30 por persona.)

-Grupo de seis personas: 150 euros. (Se abona 25 euros por cada miembro al aplicar un descuento de 5 euros por persona.)

Desplazamiento desde Isla Mauricio (Beau Champ) hasta la Isla de los Ciervos.

Llegados a Beau Champ el conductor del taxi se encargará de facilitarte el contacto para comprar los billetes, de ida y vuelta con hora de retorno obligado, (en nuestro caso a las 15:00 horas. Ojo aquí: sé puntual.)

Los billetes nos costaron 25 euros (por persona) y nos trasladamos en lancha rápida, aunque también se puede ir hasta la isla en otros tipos de barco como el catamarán o en yate.

La travesía marítima, de 15 minutos de duración aproximadamente, nos resultó agradable y muy divertida porque íbamos a tanta velocidad que no podíamos dejar de reírnos ¡Eso que nos golpeábamos y el agua nos salpicaba! Sin embargo, nuestro afán aventurero pudo con esos avatares; con esos y con todos los que se nos pongan por medio. Y es que, posiblemente, hace tiempo nos pusimos el Mundo por montera, y vamos a por todas.

Mencionar de forma especial la densa vegetación que hay a ambos lados del camino. Y la fabulosa panorámica, donde las verdes montañas son las absolutas protagonistas.

          Actividades.

Las actividades más interesantes son las acuáticas; no podría ser de otro modo. Practicar snorkel, volar en parasailing, jugar al golf en el colosal campo para tal menester, propiedad del hotel Le Touessrok. Pasear por el borde de la orilla, coger erizos; caminar por las sendas interiores… Hacer shopping, es decir, comprar regalos en las pequeñitas tiendas de pareos y demás objetos de playa.

Por un instante olvídate del Mundo mientras te relajas sobre una tumbona con el pretexto de que los rayos del sol tuesten la piel de tu cuerpo.

En la Isla de los Ciervos la palabra stress no tiene cabida. Así que reitero: relax y a olvidarse del mundanal ruido.

           Comidas y bebidas.

Podrás almorzar en el restaurante platos típicos culinarios de carne o pescado. Aviso a navegantes, los precios son bastante elevados, especialmente las bebidas refrescantes.

Otra opción es encargar una barbacoa: carnes a la brasa harán las delicias de cualquier paladar, máxime tras una intensa jornada de sol y playa.

Todo lo que comienza, termina.

Como no, debes regresar y hacer el mismo recorrido; pero ahora a la inversa.

Mientras vuelves al barco reflexiona acerca de lo vivido. Porque has pasado un día inolvidable.

A bordo, después de haber retomado la normalidad de la vida del barco, suspira mientras miras hacia el horizonte solo para poder contemplar la extraordinaria puesta de sol. Y deja que, las invisibles manos que pintan coloridos cuadros abstractos, te inviten a soñar despierto con nuevos destinos… Antes de que la noche te selle el pasaporte para el sueño.

Por Carolina Olivares Rodríguez